La portavoz adjunta del grupo socialista en las Cortes Valencianas Nuria Espí aseguró ayer que la Comunidad Valenciana "es un ejemplo de cómo no hay que hacer las políticas sociales", y consideró que el primer paso para encontrar soluciones al problema de la exclusión social es elaborar un diagnóstico. Espí se pronunció de esta forma después de que el miércoles Cáritas Diocesana de Valencia denunciara el recorte de ayudas económicas destinadas a los más pobres llevado a cabo por el Consell.
La diputada socialista señaló que en "múltiples ocasiones" durante las legislaturas anteriores el partido socialista ha denunciado que la prestación económica reglada se había dejado a unos niveles por parte de la Consejería de Bienestar Social que eran una "salvajada". Espí exigió a la Bienestar Social que elabore "de una vez por todas" un diagnóstico de las situaciones de exclusión en la Comunidad Valenciana, ya que en estos momentos "se trabaja a salto de mata, en función de las peticiones" que se formulan. La representante del PSPV aconsejó que se llegue a convenios "como mínimo plurianuales", para que entidades como Cáritas puedan desarrollar un trabajo complementario al de la Administración en la atención a las situaciones de exclusión social.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 20 de junio de 2003