El PSOE "no es de fiar" porque es capaz de gobernar en distintas partes de España con "partidos anticonstitucionales, aconstitucionales, oportunistas o simplemente impresentables". Lo dijo ayer Esperanza Aguirre, portavoz del Partido Popular en la Asamblea de Madrid, en su discurso, y puso cuatro ejemplos de partidos que entrarían en esa clasificación: el Partido Aragonés, el Bloque Nacionalista Galego, Esquerra Republicana y el GIL.
Fue una de las muchas veces en las que la portavoz del PP estuvo a punto de levantar a los diputados del PSOE de sus asientos. Las protestas indignadas de los parlamentarios socialistas, que se tornaban a menudo en sonoras carcajadas y a veces incluso en irónicos aplausos, jalonaron la intervención de Aguirre y pusieron en serios aprietos a la presidenta de la Cámara, Concepción Dancausa. Sobre todo, porque la portavoz del PP se empeñó en responder a cada protesta y acabó entablando auténticos diálogos con la bancada del PSOE.
Con quien no hubo posibilidad de diálogo fue con el propio Rafael Simancas, a quien Aguirre había llamado "mentiroso" media docena de veces. El socialista respondió cuestionando la "convicción democrática" del PP. Y lo justificó al mostrar a la Cámara una carta de 1992 en la que un constructor pedía "por favor" a la dirigente popular que intercediese ante un alcalde del Partido Popular, porque no le dejaba ajardinar una parcela.
Figuraba a continuación la respuesta escrita de Aguirre, quien había sugerido al alcalde que estudiase el asunto. Fue el único documento que pudo verse en toda la sesión.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 29 de junio de 2003