Tras seis meses de estabilidad monetaria, la Reserva Federal volvió a introducir estímulos en el mercado y situó el tipo de intervención en mínimos históricos (1%). A pesar del riesgo de deflación, el mercado reaccionó de forma favorable ante un movimiento de relajación de la política monetaria que podría ser el último. Durante las dos próximas semanas comenzarán a publicarse los preanuncios de los resultados empresariales del segundo trimestre, para los que se espera un crecimiento superior al 5%. Las estimaciones del consenso siguen manejando para el ejercicio crecimientos del beneficio por acción en torno al 12%, lo que no cabe duda únicamente podría darse en un escenario de recuperación del ciclo. Por otro lado, destaca esta semana la emisión de bonos realizada por General Motors que ascendía a 17.000 millones de dólares y se convertía en la mayor de la historia.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 29 de junio de 2003