Un inmigrante ecuatoriano de 24 años, cuyo nombre corresponde a las iniciales M.A.L.A., se encuentra ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Clínico de Madrid en estado de "extremadamente crítico", según informó un portavoz del centro sanitario. El joven fue agredido la mañana del pasado domingo en la zona de copas de los bajos de Aurrerá, en el distrito de Chamberí, por un grupo de jóvenes que le abrió la cabeza con un adoquín que había en la zona, además de propinarle golpes por todo el cuerpo, según explicaron fuentes policiales.
Los hechos ocurrieron sobre las 7 de la mañana en la calle de Galileo, cuando M.A.L.A. iba paseando junto con otros compatriotas. De repente se puso a su altura un grupo de motoristas que comenzó a insultarles. Después se bajaron de sus vehículos y con las cadenas pitón (utilizadas para evitar el robo de las motos) comenzaron a golpearles con saña tanto a la víctima como a sus acompañantes, según fuentes policiales.
Los jóvenes intentaron repeler la agresión, pero dada la virulencia que empleaban los atacantes no tuvieron opción de defenderse. Los agresores emplearon incluso objetos que había en el lugar de la agresión. En un momento dado uno de ellos cogió un adoquín y propinó múltiples golpes al inmigrante en la cabeza, además del resto del cuerpo. Fuentes de la investigación creen que los agresores estaban muy ebrios o habían consumido algún tipo de estupefacientes.
El joven sufrió un fortísimo traumatismo craneoencefálico. Fue trasladado al Hospital Clínico, donde anoche se debatía entre la vida y la muerte. Estaba en coma profundo y con respiración asistida. Su pronóstico era "extremadamente crítico".
El suceso fue tramitado en un principio por agentes de la comisaría de Chamberí, pero, dado que M.A.L.A. puede fallecer en las próximas horas, ayer se hizo cargo del caso el grupo VI de Homicidios de la Jefatura Superior de Policia. La zona de copas conocida como los bajos de Aurrerá representa un foco de problemas para la policía.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 2 de julio de 2003