El IES F. Figueras Pacheco va a ser ampliado. El instituto, ya remodelado hace 16 años, se quedó pequeño hace mucho tiempo. La duración prevista: 18 meses, dos cursos. Los alumnos afectados: más de 2.300. Profesores y personal no docente: cerca de 200. Ante esta situación a los padres nos preocupan muchas cosas: la seguridad, la posible pérdida de clases y las inevitables molestias que producen las obras. Sabemos, y por lo tanto aceptamos, que son obras necesarias. Llevamos mucho tiempo esperándolas. Tanto nuestros hijos como sus profesores van a estar incómodos. Es inevitable. Las obras, cuando se ha de convivir con ellas, siempre son incómodas.
Para realizar estas obras se propusieron varias soluciones. El consejo escolar del centro, tras informarse de cómo estaba previsto ejecutarlas, propuso que se efectuasen por fases, aunque no fuera ésta la primera opción prevista.
Nuestra propuesta parece que ha sido aceptada, por lo que la APA agradece a la Consejería de Educación que haya defendido la propuesta del consejo escolar, así como a CIEGSA y la empresa constructora Ploder, que la hayan aceptado. Obras son amores, tenemos muchas expectativas: expectativa de que va a quedar un instituto que cubra todas las necesidades, de que las obras se ejecuten con seguridad y prontitud, que las aulas prefabricadas que se van a colocar sean de la calidad que CIEGSA ha prometido. Somos muchos los que estamos pendientes, no vayan ustedes a fallar, no vayan ustedes a suspender.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 3 de julio de 2003