Artur Mas, conseller en cap y candidato de CiU a la presidencia de la Generalitat, admitió ayer que no existe "un clamor en la calle" para reclamar un nuevo Estatuto, pero sí demandas concretas que podrían canalizarse a través del nuevo texto: la ordenación de la inmigración, la gestión de las infraestructuras, la presencia del catalán en Europa o las selecciones deportivas catalanas.
"En Madrid, con la tolerancia de algunos partidos como el PSC, se ha llegado a la conclusión de que todo eso de la autonomía de Cataluña y el autogobierno ha tocado techo. No nos quieren dejar avanzar mucho más", explicó ayer en Platja d'Aro (Baix Empordà) tras pronunciar la conferencia Un nou Estatut per Catalunya en la escuela de verano de Unió Democràtica (UDC).
Mas negó que CiU esté haciendo un uso partidista del Estatuto y aseguró que se limitaban a informar a su electorado sobre sus intenciones. El conseller en cap se refirió en su discurso a la necesidad de "vertebrar una mayoría nacionalista", sin "fuerzas dependientes", para liderar su proyecto. Un resultado electoral que no comportara esa vertebración nacionalista supondría "la rendición de Cataluña" ante los poderes de Madrid.
La Escuela de Verano de UDC ha tenido como ejes básicos la integración social de los discapacitados y el nuevo proyecto de Estatuto.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 6 de julio de 2003