Francisco Medina Sánchez, de 48 años y trabajador en la oficina consignataria de Transmediterránea en Almería, murió ayer mientras perseguía a dos ladrones por las calles de la ciudad. Según algunos testigos presenciales, Medina presenció como estos individuos atracaban a una señora y se fue a por ellos. A la altura del parque Nicolás Salmerón, uno de estos sacó una pistola y le pegó un tiro en un ojo. La policía detuvo ayer a los dos supuestos homicidas y ladrones. Uno de ellos es menor de edad. Aún no se ha esclarecido quién apretó el gatillo.
"Todavía es todo muy confuso. Ha ocurrido todo en la calle, no en la oficina. Estaban robando a una señora y él ha ido tras los ladrones", sintetizaba una compañera de la víctima. Medina ingresó en la UCI del Hospital Torrecárdenas a los pocos minutos del suceso y falleció apenas dos horas después. La bala le penetró cerca de la cuenca del ojo derecho y quedó alojada en el encéfalo.
Al menos diez vehículos policiales acordonaron toda la zona centro de Almería sobre las 14.30 horas y detuvieron a los presuntos agresores. Un testigo presencial de la detención, Mohamed Ben-Sarifa, aseguraba ayer: "Les han descubierto navajas, cinco o seis cuchillos y el arma con la que han disparado".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 10 de julio de 2003