El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) ha rebajado de cinco a dos años la sanción de suspensión de empleo y sueldo impuesta por el Departamento de Gobernación de la Generalitat a un agente de los Mossos d'Esquadra por robar 12 euros tras forzar la taquilla de un compañero. El tribunal apunta que la conducta del agente "creó alarma y malestar" entre los miembros del cuerpo.
Los hechos ocurrieron el 11 de abril de 1995, cuando el mosso suspendido se encontraba en los vestuarios de la Dirección General de Seguridad Ciudadana de la Generalitat y, aprovechando que no había nadie más, forzó la puerta de la taquilla de un compañero y cogió las 2.000 pesetas (12 euros) que éste había dejado antes de cambiarse.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 13 de julio de 2003