El prestigioso economista belga André Sapir presentó ayer en la sede de la Comisión Europea el revolucionario informe elaborado durante un año por un grupo de expertos a iniciativa del presidente del Ejecutivo comunitario, Romano Prodi. Los autores del documento (ver EL PAÍS de los días 15, 16 y 17) recomiendan una radical reorientación del presupuesto comunitario (unos 100.000 millones de euros anuales), de forma que una buena parte del mismo se destine a un fondo especial para promover el crecimiento a costa de reducir drásticamente las ayudas destinadas a la Política Agrícola Común (PAC) y a los fondos regionales, que quedarían desmantelados. Pero además apuestan por una flexibilización del Pacto de Estabilidad.
MÁS INFORMACIÓN
El informe, significativamente titulado Una Agenda para el Crecimiento en Europa, señala que en épocas de contracción económica como la actual debiera permitirse una mayor flexibilidad al aplicar el Pacto, de forma que a los países afectados se les permita tener un déficit público superior al límite del 3% del producto interior bruto (PIB). "Aumentar el crecimiento requiere reformas masivas", señala. Algunas de las principales recomendaciones incluidas en el documento son las siguientes:
- Crear tres fondos comunitarios: Crecimiento, Convergencia y Reestructuración. Al primero, totalmente nuevo, se destinaría el 45% del dinero para investigación, infraestructuras y educación. Los recursos procederían de enormes recortes a la PAC y a las ayudas regionales. España perdería en el futuro casi los 13.000 millones anuales que recibe, aunque le corresponderían otras cantidades del Fondo de Crecimiento.
- Ayudas a países, no a regiones: Los actuales fondos regionales no se distribuirían de acuerdo con el PIB de cada región, sino con el PIB nacional. Los países que superen la media comunitaria no recibirán ayudas aunque tengan regiones muy pobres. Por tanto, casi todas las ayudas de ese capítulo irían a los países candidatos.
- Competencia : Debe crearse una autoridad independiente para regular la política de la Competencia, hoy en manos de la Comisión.
- Investigación : Crear una Agencia Europea de Ciencia e Investigación, como existe en EE UU. Aumentar el gasto en investigación (del 1,9% del PIB al 3%) y educación (del 1,4% a más del 3%).
- Mercado Único : Completar el Mercado Único, incluyendo los servicios financieros
- Tarjetas Verdes : Conceder "cartas verdes" o permisos de trabajo temporales a inmigrantes.
- Control presupuestario : Reforzar a la Comisión en la vigilancia presupuestaria y crear auditoras nacionales independientes.
- Coordinación : Mejorar la coordinación política y el diálogo entre el Consejo de la UE, la Comisión y el BCE.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 18 de julio de 2003