La bailaora Cristina Hoyos, el director de escena José Carlos Plaza y el guitarrista José Luis Rodríguez son los vértices del triángulo del que ha surgido una nueva versión de Yerma. La tragedia de Federico García Lorca se estrenó ayer en los jardines del Generalife de Granada contada en clave de baile flamenco por la compañía de Cristina Hoyos.
La bailaora sevillana, quien ya había puesto en escena el drama de García Lorca en 1992, firma la coreografía y estuvo casi todo el tiempo en escena en el papel de la vieja pagana.
"Hemos creado una Yerma muy transparente. El personaje, que interpreta maravillosamente Susana Casas, parte de la alegría y va evolucionando hasta llegar a la desesperación", explica Cristina Hoyos. Para la bailaora, quien en 1992 encarnó a la protagonista de este drama rural que gira en torno a la esterilidad y a una sociedad castrante, este nuevo montaje cuenta con "un lenguaje más teatral". "Al enfrentarme otra vez al texto he encontrado matices distintos. El espectáculo de 1992 era más flamenco, la dirección escénica no pesaba; mientras que esta vez existe un equilibrio entre teatro y danza", comenta Hoyos.
"La colaboración ha sido fluida porque Cristina me ha ido aportando muchas ideas. Trabajar con ella es tan maravilloso como hacerlo con Peter Brook", apunta José Carlos Plaza.
Yerma estará en cartel hasta el 23 de agosto y forma parte del III Festival de Lorca de los Jardines del Generalife. El montaje, que interpretan 18 bailaores y la cantaora Ana Ramírez, es el último en subir al escenario del teatro al aire libre del Generalife, un espacio que será reformado en septiembre. El teatro, dentro del conjunto monumental de la Alhambra, ha sido una de las sedes del Festival Internacional de Música y Danza de Granada desde 1953, año en que lo inauguró la compañía de Antonio el bailarín.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 18 de julio de 2003