El historiador y economista Oriol Balaguer es el nuevo director gerente del Instituto de Cultura de Barcelona (Icub), en sustitución de Jordi Martí, que ha cesado de su cargo de forma voluntaria. Balaguer, hasta ahora director general de Barcelona Activa, fue nombrado oficialmente el pasado jueves, aunque de hecho el relevo se produjo ya a principios de julio; desde entonces el nuevo director gerente ha compaginado ambos cargos y ha abandonado escalonadamente sus responsabilidades en Barcelona Activa, agencia municipal encargada del diseño y la ejecución de las políticas de promoción económica, ocupación y fomento del espíritu empresarial.
Martí, que ahora realizará una estancia de varios meses en Brasil, seguirá vinculado al Ayuntamiento de Barcelona, aunque de forma externa. Su próxima ocupación le ligará al Fòrum de les Cultures 2004 como responsable del congreso de autoridades locales Porto Alegre- Barcelona, centrado en el tema de la ciudad y la cultura, y del desarrollo de la Agenda 21 de la cultura, tareas que codirigirá junto con Vanessa Marx (representante de Porto Alegre).
Según el concejal de Cultura del Ayuntamiento de Barcelona y presidente del Icub, Ferran Mascarell, el de Balaguer es un perfil distinto al ofrecido por Martí. El hasta ahora director gerente del instituto "venía del mundo de la enseñanza, de la gestión y de la educación, ligado básicamente a la empresa privada". En cambio, su sustituto procede del ámbito público y está muy familiarizado con la gestión empresarial y la formación de empresas. "Puede introducir una determinada cultura en el área de gestión muy conveniente para el Icub", señala Mascarell, y añade que Balaguer aportará una valiosa experiencia "porque ha llevado las riendas de algo tan grande como es Barcelona Activa".
Mascarell señaló que lamenta la marcha de Martí, pero a continuación indicó que ésta no ha supuesto ninguna sorpresa, pues el director cesante la había anunciado ya meses atrás. De momento, el ex director gerente ha decidido tomarse unos meses de descanso y a su vuelta empezará a trabajar en el congreso Porto Alegre-Barcelona de 2004, en el que, según el concejal, se pretende "poner la cultura en el centro de la construcción de la ciudad" y dar forma a la Agenda 21 de la cultura, que consiste en crear un modelo cultural, "definir unos estándares que ayuden a las ciudades del mundo a crecer culturalmente".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 19 de julio de 2003