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Estados Unidos le deniega la entrada al país a Kluivert

Un problema con el visado obligó al delantero a dejar el equipo y volver a Barcelona

El Barcelona comenzó ayer con mal pie su gira por Estados Unidos. El largo viaje en avión que trasladó al equipo azulgrana a Boston, vía Francfort, se desarrolló con absoluta normalidad hasta que los miembros de la expedición tuvieron que pasar el control de pasaportes. Todos los jugadores fueron pasándolo sin problemas. Hasta que le tocó el turno a Patrick Kluivert. "¿Tiene usted antecedentes penales?", le preguntó el policía de aduanas del aeropuerto de Boston. "Sí", admitió el holandés. "¿Me permite ver el visado especial correspondiente?". Mutis.

Fue el inicio de la odisea. Kluivert carecía del documento que las leyes americanas exigen a las personas que visitan el país y que han tenido causas con la justicia, a pesar de que el futbolista ya tuvo este mismo problema cuando las autoridades estadounidenses le denegaron la entrada al país hace dos años. El problema es que Kluivert no puso en conocimiento del club azulgrana su especial situación y por ello el Barcelona no solicitó el visado especial a la embajada americana en Madrid.

Kluivert fue requerido por los agentes de la aduana para que pasara a una sala donde fue sometido a tres horas de interrogatorio. No estuvo sólo. El delantero holandés permaneció acompañado de Cristina Vázquez, la secretaria del responsable de mercadotecnia del club azulgrana, Esteve Calzada, y de José Fraga, un miembro de la organización de la gira denominada Champions World. El resto de la expedición, mientras, se acomodó en un céntrico hotel de Boston a la espera de noticias sobre Kluivert.

Calzada llegó a Boston dos horas más tarde de lo que lo hizo el avión que desplazó a la expedición azulgrana. Lo hizo en otro vuelo, en el mismo en el que viajaron los periodistas desplazados desde Barcelona para cubrir la información sobre la gira del equipo azulgrana. Así que Calzada tuvo conocimiento del hecho, intentó negociar el problema con la polícia americana, aunque sin éxito. "No estábamos al corriente de la necesidad de tramitar un visado especial para que Kluivert pudiera entrar en los Estados Unidos", señaló Calzada.

Ante la imposibilidad de resolver el conflicto de manera rápida, se decidió que el holandés regresara de inmediato hacia España. El jugador tomó un vuelo de regreso a Barcelona a las cinco de la tarde, hora de Boston. Tiene previsto llegar de nuevo a Barcelona este mediodía para tramitar el visado especial en la embajada americana, en Madrid, y regresar a Estados Unidos el próximo lunes para reincorporarse a la concentración del equipo.

Kluivert, por lo tanto, no jugará el primer amistoso de la gira del Barça, mañana, ante el Juventus, aunque sí podría disputar el segundo y tercer encuentro, ante el Milan y el Manchester United, el próximo miércoles y el 3 de agosto, respectivamente.

El viaje del Barça a Boston se inició ayer a las siete de la mañana desde el aeropuerto del Prat. Desde allí, el grupo se trasladó a Francfort, donde la policía alemana aplicó a la expedición unas severas medidas de seguridad, antes de enlazar con el vuelo que lo condujo a Boston.

Antecedentes penales

Kluivert sufrió un accidente automovilístico al norte de Amsterdam el 9 de septiembre de 1995. El coche del jugador se estrelló contra otro vehículo. Una persona resultó muerta en el acto, mientras que el futbolista sufrió diversas contusiones. Kluivert fue juzgado y acusado de homicidio involuntario por conducción temeraria. Un año después, Kluivert fue condenado a 200 horas de servicios sociales.

No terminaron ahí los problemas del holandés con la justicia de su país. El 13 de junio de 1997, la entonces joven estrella del Ajax, se vio envuelto en un nuevo escándalo. Una joven, de 20 años, le acusó de violación en compañía de tres amigos del jugador. El jugador y su abogado negaron los hechos. Tras una exhaustiva investigación por parte de la policía holandesa, Kluivert fue absuelto por la justicia.

* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 26 de julio de 2003