La 15ª edición del Festival Internacional Espárrago Rock se despidió anoche tras más de 48 horas de fiesta y música. Más de 15.000 personas, según la organización, disfrutaron de los conciertos programados desde las 17.00 horas en los cinco escenarios del recinto.
Ya sobre las 14.00 horas y con un sol que no se apiadaba de nadie, una decena de afortunados bailaba en la explanada donde se levanta el escenario Andalucía al son del ensayo de Amaral, que preparaba el multitudinario concierto que ofrecería horas más tarde. Mientras tanto, la zona de acampada estaba semidesierta. A pesar de que el viernes la fiesta se alargó hasta bien entrada la mañana, pocos soportaron las temperaturas que se registraban en el interior de las tiendas de campaña y se produjo una salida masiva hacia las piscinas de Jerez y las playas de la costa gaditana.
A la caída del sol, el Espárrago volvió a ofrecer su mejor cara. Como en el día anterior, los escenarios Andalucía y Flamenco viene del Sur contaron con el respaldo mayoritario de un público que, no obstante, podía disfrutar de música a la carta.
Música electrónica
Amaral, Orishas y Reincidentes despertaron a los que todavía arrastraban sueño del día anterior. Los jerezanos Navajita plateá ofrecieron un concierto en el que repasaron todos los éxitos de su carrera, y el trío sevillano Las Niñas se consagró con un estilo transgresor y unas letras muy coreadas. Las carpas de música electrónica fueron las últimas en desconectar los equipos de música en los que sonaron los temas de los más reconocidos dj del país.
El Espárrago se despidió con dudas sobre su continuidad. La empresa promotora, Munster Tourin, ofrecerá mañana los datos económicos de la edición recién concluida. De ellos depende el futuro del pionero de los festivales andaluces.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 27 de julio de 2003