El primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, fue derribado por el caballo que montaba ayer en un acto público en Estambul en medio del revuelo de sus guardaespaldas. Los médicos que le examinaron no le hallaron ninguna lesión grave.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 31 de julio de 2003