El Tribunal Superior de Justicia de Madrid ha obligado a El Corte Inglés a readmitir a dos trabajadores de Comisiones Obreras a los que despidió después de que repartieran unos panfletos en los que se atribuía a la empresa una "actuación terrorista". El tribunal considera que ese lenguaje, aunque "es desabrido y disgusta", debe encuadrarse "en el marco de la tradicional contienda sindical". Asimismo destaca que los trabajadores no eran más que "simples mensajeros del sindicato".
Ante esos hechos, la justicia cree que la verdadera intención de la empresa fue "expulsar de su seno a los trabajadores de CC OO que le eran molestos", por lo que declara nulo el despido y obliga a recolocar a los empleados y devolverles los salarios atrasados.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 9 de agosto de 2003