Cuatro policías y un militante islámico resultaron muertos ayer en un enfrentamiento en Riad, la capital de Arabia Saudí, a raíz de que las fuerzas de seguridad de este país efectuaran una redada contra un presunto feudo terrorista, según fuentes oficiales. Tras los atentados suicidas que el pasado mayo causaron 35 muertos en la capital saudí, el Gobierno de Riad ha lanzado una ofensiva contra los militantes sospechosos de tener vínculos con la red terrorista de Al Qaeda, que dirige el saudí Osama Bin Laden.
"Algunos sospechosos aún siguen escondidos en una de las casas", aseguró una fuente policial a última hora de ayer cuando ya hacía cinco horas que había comenzado el tiroteo. "Hay al menos 15 heridos", añadió.
Se trata del cuarto incidente de este tipo en el último mes. El pasado lunes, la policía anunció que había detenido a una decena de presuntos terroristas tras el tiroteo que se produjo el domingo también en Riad. Sin embargo, el Foreign Office británico dijo ayer que los sospechosos, que al parecer trataban de atacar intereses británicos, habían logrado escapar.
"Estamos al tanto de los informes que dicen que los sospechosos pretendían atacar intereses británicos. Creemos que han escapado. No tenemos confirmación de que fueran detenidos", aseguró el portavoz del Foreign Office.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 13 de agosto de 2003