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GENTE

Dos jóvenes directores sevillanos debutan en Venecia

Cuatro días de rodaje, un año de posproducción y 42.000 euros (alrededor de 7 millones de pesetas) han dado como resultado Relojes de arena, el único cortometraje español seleccionado para competir en la 60 edición de la Mostra de Cine de Venecia, que comenzará el próximo 27 de agosto. Los padres del proyecto son José Francisco Ortuño y Laura Alvea, dos jóvenes guionistas sevillanos que se estrenan como realizadores con este cormetraje de temática dura y estética arriesgada.

"El corto es un metáfora del mundo actual, una alegoría simbólica sobre el papel de la mujer en nuestros días. Se desarrolla en un mundo ficticio y cuenta la historia de un hermano que, siguiendo la tradición de la sociedad en la que vive, se ve obligado a coserle la boca a su hermana cuando ésta cumple cierta edad". Así explica José Francisco Ortuño el argumento de este cortometraje que, pese a haberle costado más un año de tiempo y esfuerzo, apenas dura cuatro minutos.

Y es que la posproducción de Relojes de arena ha sido muy laboriosa. El filme mezcla imágenes reales con maquetas utilizando fotografías digitales de alta definición, así como técnicas tradicionales de animación. "La realización ha sido muy compleja", reconoce Ortuño, "hemos utilizado más de 300 fotografías. Los planos no tienen movimiento. Todo el movimiento se consigue a través del montaje".

Mucho ha pesado el montaje y la estética arriesgada del proyecto para su participación en el certamen de Venecia. El cortometraje compite en Nuevos Territorios, una sección abierta al cine experimental que incluye también largometrajes.

De la producción de Relojes de arena se han hecho cargo los propios directores junto con La Zanfoña Producciones y Mundoficción, sin contar con ningún tipo de ayuda pública. "Nos rechazaron todas las subvenciones que solicitamos", dice el director, que espera que el proyecto pueda ser distribuido pronto al gran público. "Lo hemos mostrado en varios festivales en España y hemos recibido siempre muy buena respuesta. Eso fue lo que nos animó a presentarlo a Venecia".

* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 13 de agosto de 2003