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LA PLAGA DE LOS INCENDIOS FORESTALES

Un nuevo incendio obliga a desalojar a 2.900 personas en Girona, junto a la Costa Brava

El cruce de fuegos provoca el corte de la autopista de Barcelona a Francia durante tres horas

Prohibido respirar tranquilo en Cataluña. Justo cuando el incendio que afecta a la provincia de Barcelona desde el pasado domingo comenzaba a quedar bajo control, otro frente de grandes dimensiones comenzó a arder en la tarde de ayer en Tordera y Maçanet de la Selva (Girona), en la zona interior próxima a la Costa Brava. El nuevo siniestro obligó a desalojar de sus viviendas a unas 2.900 personas, repartidas en media docena de urbanizaciones. También tuvo que ser cortada a causa de las llamas la autopista A-7, que conecta Barcelona con Francia.

Por si la situación no era suficientemente grave con los incendios declarados el pasado domingo en Sant Llorenç Savall, Gallifa y Monistrol de Calders, en el interior de la provincia de Barcelona (comarcas del Vallès y el Bages), los servicios de emergencia tuvieron que sumar ayer por la tarde dos nuevos incendios de grandes dimensiones.

El primero comenzó en dos frentes independientes, en Tordera y Maçanet de la Selva. El otro afectó a Olèrdola (Barcelona) y los bomberos esperaban controlarlo a última hora de la noche. En cambio, el fuego de Girona presentaba muchas más dificultades, ya que los dos frentes acabaron uniéndose tras cinco horas de combustión. Sus dimensiones obligaron a desviar para combatirlo la mayor parte de los helicópteros e hidroaviones que trabajaban en el incendio del Vallès.

A última hora de la tarde se habían desalojado a cerca de 2.900 personas en seis urbanizaciones amenazadas por las llamas y, a causa del intenso humo, la policía decidió cortar la N-II y la autopista A-7, así como otras vías comarcales. Este hecho causó un gran colapso circulatorio en las rutas de acceso a Girona, a la Costa Brava y a Francia. Las vías fueron reabiertas a primera hora de la noche.

Mientras, el incendio del Vallès, que arrancó el pasado domingo, seguía activo al cierre de esta edición. El conseller en cap de la Generalitat, Artur Mas, avanzó que el incendio se encontraba bajo control, aunque los diferentes frentes activos todavía dieron importantes sustos a los bomberos.

Ya desde las tres de la madrugada, uno de los focos, junto a Granera, había vuelto a activarse peligrosamente. Durante la mañana las llamas se calmaron y quedaron bajo control, pero con el calor del mediodía volvieron a reactivarse hasta quedar descontroladas a última hora de la tarde en la zona de Mura. Ahí, muy cerca del área ya afectada por las llamas, el fuego avanzaba de forma incontrolada a primera hora de la noche. Siete helicópteros e hidroaviones se sumaron a las 500 personas que trabajaban en tierra.

En total las hectáreas quemadas son unas 5.000, cifra que las autoridades no actualizarán hasta que el incendio esté extinguido. Sin embargo, nadie se atrevía anoche a pronosticar cuándo sucederá. Los cuerpos de seguridad investigan el origen del incendio. Cada vez están más convencidos de que fue provocado en varios de sus frentes.

El incendio de Sant Llorenç Savall es el más importante del verano en Cataluña. Y el más dramático. Ayer se enterró en Sabadell a los cinco miembros de la familia Fernández, fallecidos cuando estaban a punto de alcanzar un albero. El desastre ecológico también es notorio. Entre otras zonas de alto valor ecológico, ha calcinado el 10% del parque natural de Sant Llorenç del Munt, uno de los más apreciados por los barceloneses.

El fuego empezó el domingo por la tarde en un camino cercano al municipio de Sant Llorenç que tenía el paso restringido a causa precisamente del alto riesgo de incendio en la zona. De Sant Llorenç, el fuego avanzó de manera incontrolada hacia el norte y, en la madrugada del lunes, se declaró otro foco en la localidad de Gallifa, muy cerca de Sant Llorenç. Por la hora y las condiciones en que empezó el fuego, todo apunta a que fue intencionado. En la madrugada de ayer este incendio, que ya se encontraba en vías de ser controlado, volvió a reactivarse cuando apareció un nuevo foco dentro del perímetro ya afectado por las llamas. Los mossos también sospechan que este foco pudo tener origen humano, por lo que están extremando la vigilancia.

Los bomberos estuvieron remojando el suelo afectado por el incendio durante toda la jornada de ayer. También tuvieron que apagar pequeños rebrotes, que causaron más de un susto. El principal temor era que el rebrote de Gallifa no pudiera controlarse y alcanzara el municipio de Sant Llorenç, aunque al final todo quedó en un susto.

El director general de emergencias de la Generalitat de Cataluña, Ramón Bonastre, dijo ayer por la mañana que la estrategia a seguir sería limitar el perímetro exterior del incendio. Bonastre afirmó que el fuego no se dará por extinguido hasta dentro de bastantes días, y aseguró que todavía queda mucho trabajo por hacer y que los bomberos seguirán remojando la zona.

Otra importante tarea es la de limpiar el monte, eliminar obstáculos y facilitar el camino a los vehículos de los bomberos. Para realizar esta labor, ayer llegaron tres retroexcavadoras de grandes dimensiones que permitieron abrir zanjas, cortafuegos y vías de acceso a zonas con riesgo de verse afectadas por las llamas. Artur Mas agradeció anoche al Ejército de Tierra la cesión de parte de este material y también afirmó que hacen falta más mangueras.

Sobre los orígenes de los incendios que están afectando Cataluña, Artur Mas afirmó anoche que lo importante ahora no es "pensar en las causas", sino "apagar fuegos y salvar vidas". Pero lamentó las dificultades añadidas que encuentran los bomberos a causa de la presencia de urbanizaciones sin las medidas contra incendios necesarias. Mas recordó que el fenómeno de las urbanizaciones en Cataluña comenzó "hace 40 años, cuando no había ningún tipo de control urbanístico".

La Guardia Civil detuvo ayer a un vecino de Salou acusado de causar el incendio que el pasado lunes quemó cerca de 15 hectáreas de matojos y pinos en la localidad de L'Albiol (Tarragona), informa Efe.

* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 14 de agosto de 2003