"Riquelme jugará la próxima temporada en el club que él quiera de cuantos se han interesado por sus servicios", proclamó anoche Txiki Begiristain, secretario técnico del Barcelona. Riquelme aún no ha respondido públicamente, pero ha dejado dicho que sus preferencias se inclinan por el Villarreal. El futbolista argentino ya ha dialogado con el entrenador Benito Floro, y se mantiene informado sobre el equipo a través de su compatriota Arruabarrena. La operación, sin embargo, no está cerrada todavía pese a que desde Villarreal anoche se daba prácticamente por hecha. "No puedo oficializar ningún acuerdo porque no lo hay", explicó el presidente del Barça, Joan Laporta. "Quedan cosas por hablar", un extremo que confirmaron también desde la directiva del Villarreal.
El Barcelona dispone de dos ofertas más por Riquelme. Una es del Murcia y la otra del Mallorca, el club que inicialmente más atraía a la directiva azulgrana como destino del jugador. El pase al equipo balear está condicionado, en cualquier caso, al fichaje de Ibagaza por el Atlético.
Después de descartar su regreso al Boca Juniors, el club barcelonista está dispuesto a cerrar la cesión con el club que abone el porcentaje más alto de la ficha del centrocampista, que ronda los tres millones.
La directiva azulgrana aspira igualmente a cerrar definitivamente el traspaso de Alfonso al Betis mientras que el futuro de Bonano, Dani y Enke es más complicado. El meta alemán renunció a continuar jugando como cedido en el Fenerbhace después de ser abucheado por la hinchada turca al recibir tres goles (0-3) en su estreno en el primer partido de Liga.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 27 de agosto de 2003