La vuelta al cole pesa al bolsillo de casi todos los españoles, y las entidades financieras lo saben muy bien. Por eso, y para hacer más llevadera la cuesta de septiembre, bancos y cajas de ahorro ofrecen una amplia gama de préstamos para financiar estudios en la universidad o másteres, pasando por el adelanto de becas o estudios más específicos, de idiomas o música. Es la temporada de ponerse a pensar cómo financiar los estudios. Según las entidades financieras españolas, los meses de julio, septiembre y octubre concentran el 80% de las peticiones recibidas durante todo el año.
Los préstamos para estudios funcionan, en líneas generales, como préstamos al consumo. Hay que tener en cuenta cuatro variables fundamentales: el tipo de interés nominal, el plazo de amortización, el importe máximo a financiar y las comisiones de apertura y cancelación anticipada.
En todo caso las entidades suelen ofrecer bastante flexibilidad en sus productos. Muchos de ellos carecen de comisiones, y los tipos de interés se sitúan en una banda comprendida entre el 6% y el 7%. En determinados casos, las condiciones del préstamo adquieren un alto nivel de sofisticación. Por ejemplo, puede haber uno o varios años de carencia, en los que sólo se abonan los intereses y no se realizan devoluciones del capital prestado.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 31 de agosto de 2003