Un hombre de 31 años detenido en los calabozos del Cuartel de la Guardia Civil del Puerto de Mazarrón fue encontrado muerto ayer por la mañana por los agentes después de que el día anterior le fuera suministrado un tranquilizante por prescripción médica. El hallazgo tuvo lugar hacia las 7.50 de la mañana, cuando se procedía a realizar una inspección rutinaria de los calabozos del cuartel murciano. Según el relato de la Delegación del Gobierno, los agentes observaron que uno de los detenidos, A. S. C., vecino de Puerto de Mazarrón, se encontraba inmóvil y no respiraba por lo que se procedió a avisar de forma urgente al servicio médico UME. Un facultativo certificó la defunción, que situó entre las 16 y las 17 horas del domingo.
El fallecido, toxicómano según la versión oficial, había sido detenido por desobediencia grave a agentes de la Guardia Civil, en un centro de salud al que había acudido con el síndrome de abstinencia. "Por prescripción facultativa, y ante el estado de ansiedad y nerviosismo que presentaba", se le suministraron tranquilizantes a la una de la tarde del domingo y luego permaneció inmóvil en el calabozo.
Al fallecido le será practicada la autopsia para determinar las causas de su muerte, aunque fuentes oficiales aseguran que con toda probabilidad se trata debió a una parada cardiorrespiratoria.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 2 de septiembre de 2003