El Juzgado de Instrucción número 2 de Castellón encargó un informe pericial para determinar el estado en el que se encontraba la albufera de Oropesa, tras la decisión de paralizar las obras de urbanización y de ejecución de una carretera.
El informe señala como de "especial relevancia" la existencia de dos asociaciones vegetales "de gran valor ecológico", y sostiene que pese a los aterramientos a los que fue sometida la zona "de ningún modo" han provocado que ésta haya perdido su "naturaleza de zona húmeda y su interés biológico". Como conclusión, el perito sostiene que es necesario mantener el cese de las obras y la restauración de los hábitat originales permitirán su recuperación.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 10 de septiembre de 2003