En la edición del día 11, su periódico, en una pequeña nota, relata la imposibilidad para tratar, analizar, anular los juicios sumarísimos que el Gobierno nacional realizó, durante la Guerra Civil y tiempo después, y de los que se valió para ejecutar y deshacerse de muchos de sus adversarios. Es increíble que el Gobierno y el Estado españoles estén inmiscuidos en el análisis y posible castigo de los terribles crimenes y atrocidades que otras dictaduras realizaron en Latinoamérica y cada vez que alguien intenta realizar algún análisis de lo ejecutado por el franquismo, sea rápidamente acusado de ver hacia al pasado y ser retrogado. No parece congruente intentar juzgar a otros y negar la posiblidad de hacerlo al interior.
Dos refranes caben: "Ver la astilla en ojo ajeno y no ver la viga en el propio" y "Farol de la calle y oscuridad de la casa".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 14 de septiembre de 2003