El Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) ha constatado una reducción en los valores radiológicos en la Acería Compacta de Bizkaia (ACB), que hoy cumple ocho días parada por el cesio 137 detectado en un camión que salía de la factoría. Incluso el domingo se realizó un arranque de uno de los hornos sin que se detectase ninguna situación anormal. La siderúrgica sigue con el plan de limpieza, por lo que la vuelta a la producción no se producirá al menos hasta finales de esta semana.
El CSN recibió el sábado los datos de los análisis realizados en las áreas contaminadas, el silo donde se ubican los polvos de acería y las tuberías por las que discurrieron. "Los valores radiológicos han disminuido considerablemente" desde el martes, indicó el organismo de protección nuclear, que añadió que se encuentran por debajo de lo permitido. Las muestras de polvo de humo analizadas tampoco han superado los 5,5 bequerelios por gramo, cuando el umbral se sitúa en 10.
El plan de limpieza impuesto por el CSN, llevado a cabo por las empresas especializadas contratadas por la ACB, aún no ha concluido. Cuando termine, la empresa deberá emitir un informe sobre los resultados al Consejo de Seguridad Nuclear, que debe realizar otro estudio favorable para que la planta vuelva a funcionar. La ACB ha aprovechado la paralización para acometer una reforma que tenía prevista para finales de mes.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 23 de septiembre de 2003