Aprovechar el sensor CCD para que capture vídeos e imágenes fijas es una tarea abocada al fracaso: para las imágenes en movimiento es suficiente con un sensor de 800.000 píxeles mientras que para tener una fotografía nítida y contrastada, se requiere una resolución al menos cuatro veces superior. Existen videocámaras para aficionado con sensores de 2 millones de píxeles, pero su coste se dispara sin que se aprecie bien la mayor resolución en un televisor convencional y las imágenes fijas no pasan de ser discretas.
Pese a ello, Samsung acaba de presentar un aparato digital que consigue tanto vídeos como fotografías de calidad. Lo logra porque no tiene un CCD, sino dos: uno de 800.000 píxeles para vídeo y otro de 4 millones de píxeles para fotografías. Cada CCD va aparejado con su propio sistema óptico. Es cuestión de girar el mecanismo en posición de vídeo o cámara para que haga la función correspondiente.
VP-D5000i
Empresa: Samsung Electronics
Precio: 1.499 euros
Teléfono: 902 101 130
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Los estudios de mercado muestran que hay muchos aficionados al vídeo que también quieren usar una cámara fotográfica y viceversa. No es raro ver a aficionados que acarrean ambos aparatos. Por eso, el aparato combinado de Samsung tiene sentido, ya que lo que no hace es vídeo y fotos a la vez.
La cámara D-5000i es suficientemente compacta como para manejarla cómodamente con una mano. Pesa 650 gramos. Como vídeo lleva un zoom óptico de 10 aumentos y como cámara fotográfica tiene un zoom óptico de tres. Viene con conexión USB y con entrada y salida tanto para IEEE 1394 (Firewire) como analógica, con lo que se pueden hacer ediciones posteriores.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 25 de septiembre de 2003