La idea de Esperanza Aguirre de fusionar las consejerías de Medio Ambiente y la de Urbanismo es una manera de ahorrar tiempo a los contribuyentes: las carreteras, las recalificaciones de terreno se harán mucho más rápido sin tener que trasladar los expedientes de consejería y así poder construir cuanto antes.
A finales del año pasado Medio Ambiente modificó su declaración de impacto ambiental para poder realizar así un nuevo trazado en la variante de Pelayos de la Presa de la M-501 con el que se consiguió lo siguiente: exponer aún más a riesgo de incendio una de las pocas zonas ZEPA que nos quedan, forzar a la fauna que habita la zona a que ya definitivamente se vaya, destrozar las laderas de los montes, un trazado de más kilómetros, aislar al municipio y de paso arruinar a los comercios. Pero eso sí, se podrán construir muchos adosados para aprovechar muy bien el terreno.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 25 de septiembre de 2003