Dos soldados estadounidenses murieron ayer en sendos ataques perpetrados en Bagdad y en Tikrit. En la capital iraquí, un soldado murió y otro resultó herido al ser alcanzados por los disparos de un francotirador mientras patrullaban en el barrio de Al Mansur, según un comunicado del mando militar norteamericano.
Horas antes, en la localidad de Tikrit, al noroeste de Bagdad, una soldado estadounidense murió a consecuencia de las heridas que sufrió por la explosión de una bomba. El incidente, en el que también resultaron heridos otros dos soldados norteamericanos, se produjo al estallar una carga explosiva al paso de un patrulla militar estadounidense cerca de una base norteamericana, situada en las proximidades de un palacio del ex presidente iraquí Sadam Husein. Tikrit, ciudad natal de Sadam Husein, se encuentra en el triángulo suní, donde se ha registrado la mayor parte de los ataques de la resistencia iraquí contra las tropas estadounidenses.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 2 de octubre de 2003