Un estudio realizado por las propias cajas de ahorros concluye que podrían reducir la factura de gastos generales en 750 millones si usasen sus recursos de una manera más eficiente, con mayor cooperación entre ellas. Esta cifra supone el 15% del total de sus costes, según el informe de la Comisión de Organización de la Confederación de Cajas (CECA), en el que han participado 42 de las 46 cajas existentes. Entre las ausentes están La Caixa y Caja Madrid.
Las cajas han visto cómo los bancos les han sacado la delantera en ahorro de costes por las fusiones del BBVA y el SCH. Desde mediados de 1999, el ratio de eficiencia de la banca (el 53%) es mejor que el de las cajas (el 58%). Esta desagradable situación les ha hecho reaccionar y han concluido que deben gastar menos en medios de pago, valores, comercialización de fondos de inversiones y planes de pensiones, informática, servicios generales, recursos humanos y asesoría jurídica y fiscal. Curiosamente, algunos de esos servicios ya los presta la CECA o Ahorro Corporación (propiedad de las cajas), lo que indica que no son utilizados en todas sus posibilidades. Los bajos tipos de interés, la fuerte competencia y la caída de los márgenes obliga a las cajas a reaccionar con rapidez, según CECA.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 4 de octubre de 2003