España ha ofrecido a Marruecos "toda la colaboración" y "todas las explicaciones" necesarias para aclarar el suceso transfronterizo que acabó el viernes a mediodía con la muerte de un porteador marroquí. El ministro del Interior, Ángel Acebes, dijo que "desde el primer momento" las autoridades han estado "en contacto permanente con Marruecos" para avanzar en la investigación.
Fuentes de Interior explicaron ayer que "no hay materia para un incidente diplomático" y que en los contactos mantenidos hasta ahora con Rabat, tanto desde el citado ministerio y como desde el de Asuntos Exteriores, "no parece que haya intención de montarlo" por parte de el país vecino. Las fuentes consultadas indicaron que Rabat y Madrid están embarcadas en una "dulcificación" de relaciones. El ministro de Fomento, Francisco Álvarez Cascos, visitó a principios de semana Marruecos con una delegación de empresarios de construcción. Además, está prevista una largamente esperada cumbre entre ambos países, los próximos días 8 y 9 de diciembre, con visita incluida de José María Aznar.
El coordinador general de IU, Gaspar Llamazares, pidió que se abra una investigación "externa" sobre los hechos, ya que no le ha parecido "muy convincente la explicación de un disparo fortuito en un momento de tensión". El diputado de la Unión Demócrata Ceutí, Mohamed Lemague, cree que el incidente es consecuencia directa de la política de represión de la Delegación del Gobierno, "en la que prima la seguridad en detrimento de la economía". El PSOE de Ceuta lamentó la muerte del porteador marroquí de mercancías y mostró su apoyo a la labor que realiza la Guardia Civil "en una situación de precariedad", según un comunicado difundido ayer.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 5 de octubre de 2003