Javier Clemente, el técnico del Espanyol, achacó a la labor arbitral una gran responsabilidad en su derrota: "El árbitro no ha acertado. Debe creer que las patadas de los galácticos no duelen", aseguró con ironía el preparador vizcaíno. Una frase a la que respondió el brasileño Ronaldo: "Nuestras patadas claro que duelen, y así tiene que ser". Clemente eludió al colegiado con una metáfora: "Es duro que no te den agua cuando tienes sed" y calificó de "dudosas" varias decisiones arbitrales.
El técnico del Espanyol responsabilizó también a sus jugadores al afirmar: "si tienes dos oportunidades buenas, si quieres llevarte algo de aquí, hay que meterlas. Si no las metes lo tienes un poquito complicado". Sin embargo también se mostró satisfecho del juego de sus hombres: "Hemos hecho trabajar muchísimo al Madrid, y por eso estoy satisfecho".
Beckham, vestido con una cazadora de piel de camello y el gesto cansado, resumió el partido, bronco, en una sola frase: "No siempre vamos a meter siete goles en el Bernabéu". El inglés, que aseguró no haberse resentido de la pequeña lesión que le dejó fuera de la lista de Oporto, afirmó que el Espanyol se había encerrado y que era "muy difícil entrar entre tantos jugadores". Un argumento que también desarrolló su técnico, Carlos Queiroz: "Sabíamos que el Espanyol se iba a defender bien e iba a desarrollar el partido al contragolpe. Este partido lo he visto muchas veces en mi vida, porque hay un equipo que intenta marcar, que tiene oportunidades, que puede hacer uno, dos, tres y cuatro goles, y el rival en un contragolpe marca y las cosas se ponen más difíciles", señaló. Una idea muy repetida entre los jugadores blancos, empezando por Casillas. Por ejemplo, Salgado insistió en esa misma idea: "Sabíamos que se iban a encerrar por su situación en la tabla. Lo complicado era marcarles el primero y abrir la lata". También el francés Zidane subrayó la actitud ultradefensiva del equipo de Clemente: "En los primeros cinco minutos no se puede sentenciar un partido. Cuando un equipo se cierra tanto como el Espanyol hay que mover la pelota y tener paciencia". El centrocampista, preguntado por su brillante actuación, confesó no saber si puede jugar "mejor". Ronaldo, el hombre que marcó los dos tantos del Madrid y que ya suma cinco goles en Liga, también redundó en el mismo argumento: "Cada vez los equipos que vienen al Bernabéu lo ponen más difícil. Se encierran cada vez con más defensas". Una teoría que Javier Clemente calificó de "estupidez" y negó que hubiese "puesto el autobús para defenderse".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 6 de octubre de 2003