El Ayuntamiento de Madrid ha iniciado, como cada año, la campaña de inspección de vehículos de transporte escolar y de menores, en la que agentes municipales comprobarán que los vehículos reúnen todos los requisitos exigidos para este tipo de traslados y realizarán controles de alcoholemia a los conductores.
El Gobierno de Madrid quiere garantizar el cumplimiento de todas las medidas de seguridad en el transporte escolar y de menores, y por ello los agentes de la Policía Municipal están realizando una exhaustiva vigilancia de este servicio en el marco de una campaña de inspección.
Los policías locales controlarán que se cumplen todas las condiciones de carácter técnico y administrativo tanto de los vehículos como de los conductores.
Entre los requerimientos de carácter administrativo se encuentran los de la autorización para realizar transporte escolar, el informe de la ITV vigente, póliza de seguro de responsabilidad ilimitada, estar al corriente del pago de las primas de la citada póliza y la certificación de la ruta o itinerario escolar.
Los agentes aprovecharán el momento de la prestación del servicio de transporte para seguir de forma directa el desarrollo de la actividad, sobre todo en lo referente a itinerarios y paradas reglamentarias.
La campaña incluye controles de alcoholemia a los conductores de estos vehículos, según informaron hoy fuentes municipales.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 6 de octubre de 2003