El Celta se salvó en los penaltis, el Málaga en la prórroga, la Real en el tiempo de prolongación, el Zaragoza en el minuto 90... Todos los equipos de Primera División que jugaron ayer salieron indemnes de la primera ronda de la Copa, pero la mayoría vivieron un suplicio. Desde que hace dos años se implantaran las eliminatorias a partido único, el torneo ha sido una trituradora para los grandes. Cinco primeras cayeron en la ronda inicial en la temporada 2001-2002 y siete en la pasada. En la edición actual, y a falta de lo que hagan hoy el Sevilla y el Albacete, sólo un equipo de la máxima categoría ha sido despedido en su estreno: el Athletic.
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- Pontevedra-Celta (1-1). En un partido tremendamente emotivo, en el que los jugadores portaron una bandera gallega con un crespón negro por la muerte de Manuel Ríos, el Celta sólo fue capaz de superar al Pontevedra (2ª B) en los penaltis. Tuvo 120 minutos para borrar el 1-1 del marcador y no lo consiguió, lastrado como se quedó mediada la segunda parte por la expulsión de Contreras.
- Ceuta-Málaga (0-1). No se fiaba Juande Ramos del Ceuta y razones tenía para ello. Hace dos años, también en la primera ronda, el actual técnico del Málaga por entonces en el Betis, se enfrentó al Ceuta. Y cayó. Ayer volvía al escenario del fracaso y tuvo que esperar a la prórroga, al minuto 111, para ver cómo Salva lograba el gol del triunfo.
- Oviedo-Real Sociedad (1-2). La Real Sociedad, visitó al Oviedo, actualmente en la Tercera División, y se salvó cuando estaba a punto de sonar la campana. Logró la victoria en el instante final, en el tiempo de prolongación, minuto 92. Gabilondo fue quien hizo el tanto de la victoria y salvó los muebles de un equipo, el donostiarra, que en las dos últimas temporadas había caído en la primera eliminatoria, ante el Hospitalet y el Zaragoza respectivamente.
- Mirandés-Zaragoza (1-2). Corría el minuto 90 cuando el canterano Iván Espadas deshacía el empate y otorgaba el triunfo al conjunto de Paco Flores. Pero, con ser ese tanto trascendente, igual lo fue el hecho de que el Mirandés, un minuto antes, fallara un penalti.
- Badajoz-Betis (1-4). Fue el Betis uno de los pocos equipos de Primera que solventó su compromiso con cierta suficiencia. Ya en la primera parte, Denilson y Capi pusieron tierra de por medio, pero el tanto de Sergio Cruz al inicio de la segunda mitad le echó emoción al asunto. Sin embargo, dos goles de Tote sentenciaron uno de los pocos partidos que siempre tuvo un ganador claro.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 9 de octubre de 2003