"Forma parte de nuestro programa electoral la incorporación al Reglamento de la Asamblea de la figura de declaración de indignidad: un sistema sancionador en virtud del cual una mayoría muy cualificada de la Cámara puede sancionar al diputado que traicione, evidentemente, la voluntad de los electores con la retirada del acta. La democracia debe reforzarse ante actuaciones de este tipo y resulta imprescindible que, más allá de actos declarativos, como el pacto antitransfuguismo, traslademos a la ley las medidas necesarias para reforzar el sistema democrático, garantizar el funcionamiento normalizado de las instituciones públicas y para evitar que, en el futuro, episodios como el vivido este verano en Madrid puedan volver a producirse".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 14 de octubre de 2003