El Consejo de Seguridad de la Organización de Naciones Unidas (ONU) autorizó anoche a las fuerzas de pacificación dirigidas por la OTAN en Afganistán a que se desplieguen en cualquier lugar de este país asiático, más allá de la zona en la que actualmente desarrolla su labor, que se limita a la capital, Kabul, y sus alrededores.
La resolución aprobada por unanimidad por los 15 miembros del Consejo de Seguridad amplía el área de actuación de las fuerzas internacionales, un objetivo que había sido largamente perseguido por el presidente afgano, Hamid Karzai.La resolución también prorroga por un año la presencia de esta fuerza internacional en Afganistán, cuyo mandato expiraba el 20 de diciembre.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 14 de octubre de 2003