El Mercosur parece al fin pasar de la idea a la acción después de casi 15 años de ser sólo una construcción teórica. Los presidentes de Argentina y Brasil, Néstor Kirchner y Luiz Inácio Lula da Silva, sellarán entre hoy y mañana en Buenos Aires una alianza política que tendrá consecuencias económicas a la hora de discutir sobre los alcances del Acuerdo de Libre Comercio para las Américas (ALCA) que propone EE UU.
Los ocho documentos que componen el llamado "Consenso de Buenos Aires", en el que además participan Uruguay y Paraguay, los otros dos integrantes de Mercosur, reiteran la dura crítica a las políticas neoliberales aplicadas durante los noventa. Además de la declaración conjunta de rigor, otros documentos sobre "el agua y la pobreza" y los acuerdos bilaterales para la aplicación de sistemas de control sanitario y fitosanitario, Lula y Kirchner avanzarán en la simplificación del proceso de legalización de documentos públicos, en el apoyo y la cooperación a las organizaciones de Defensa de la Competencia y en las facilidades para las actividades de las empresas privadas.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 16 de octubre de 2003