Unidades especiales de la policía de Azerbaiyán y varios centenares de manifestantes de la oposición se enfrentaron esta madrugada en Bakú después de que la comisión electoral central atribuyera porcentajes superiores al 80% de los votos emitidos en las elecciones presidenciales de ayer a Iljam Alíev, el hijo del octogenario presidente Gueidar Alíev, que está internado en una clínica estadounidense.
Los manifestantes se habían ido concentrando a partir de la tarde frente a la sede del partido Musavat, la fuerza política que dirige Isa Gambar, el principal candidato de la oposición, para protestar por las irregularidades detectadas en las urnas. Gambar manifestó que la victoria le había sido robada y alegó que le correspondía el 60% de los votos, según el recuento efectuado por sus observadores. Frente a la sede de Musavat hubo refriegas, coches destrozados y un número no determinado de heridos, afirmaron testigos, según los cuales el jefe de la delegación de la OSCE en Bakú, Peter Eichel, fue alcanzado también por los porrazos que propinaron a diestro y siniestro las fuerzas policiales. Éstas intentaban penetrar en la sede de Musavat y habían detenido al guardaespaldas de Gambar, según dijo por teléfono el secretario de prensa de éste, Mijmán Dgavat.
Poco después de la medianoche, cuando se habían contado los votos de 707 de los 5.111 colegios electorales, un 82,6% de los votantes se habían pronunciado por Alíev y un 9,2% por Gambar, según la comisión electoral central. Alíev se enfrentaba en condiciones privilegiadas a un total de siete candidatos. Al cerrarse los colegios, las denuncias de la oposición llovían desde Bakú y desde distintos puntos del país.
Observadores occidentales, que preferían conservar el anonimato hasta que se difunda hoy el informe oficial en el que trabajaban anoche, confirmaban los datos de la oposición. Sin embargo, el presidente del grupo de observadores de la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa, el español Guillermo Martínez Cassan, dijo que las elecciones "se desarrollaron con gran calma, muy ordenadas y sin grandes incidentes".
Según la agencia de noticias Turán, más de 15 periodistas resultaron heridos frente a la sede de Musavat antes de la medianoche y la policía confiscó varias cámaras.
La participación electoral fue bastante numerosa. A las 19 horas de Bakú (tres horas menos en España) había votado más del 61% del electorado, según cálculos independientes en el 46% de los colegios. La comisión electoral daba un porcentaje del 64,9 % de participación a las 17 horas, dos horas antes de cerrarse los colegios. Tenían derecho a voto algo mas de 4,2 millones de personas.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 16 de octubre de 2003