Selecciona Edición
Selecciona Edición
Tamaño letra

Al menos 14 muertos al chocar un 'ferry' contra un muelle en Nueva York

30 personas resultaron heridas graves en el barco que enlaza Manhattan con Staten Island

Un ferry procedente de Manhattan y cargado de personas que volvían de trabajar chocó ayer, a las 15.20 horas (21.20, hora peninsular española) contra el muelle de Staten Island, su destino final. El impacto fue muy violento y causó al menos 14 muertos y 30 heridos graves, según la agencia AP, que recogió también el testimonio que uno de los pasajeros contó a la televisión local: "Todo el mundo saltó para salvar la vida. Fue un horror. Parecía que todo un lateral se había abierto como con un abrelatas".

Otro pasajero dijo que, al acercarse al muelle de Saint George, el barco mantuvo la misma velocidad que durante la travesía. Aunque en principio se atribuyó el accidente al viento (con rachas de entre 40 y 65 kilómetros por hora), según la productora de la CNN Rose Arce, que iba en un ferry detrás del accidentado, la singladura había sido zizagueante: "El barco no iba en línea recta, como es habitual".

El alcalde de Nueva York, Michael Bloomberg, que abandonó el último partido de una emocionante semifinal de béisbol entre los Yankees y los Red Sox de Boston para ocuparse de este nuevo accidente espectacular en la ciudad, desmintió los rumores sobre el suicidio del capitán y dijo que estaba vivo y hablando con los expertos que investigan el accidente.

Sin embargo, la cadena de televisión NBC aseguraba que uno de los dos capitanes del ferry se tiró por la ventana de su casa en Staten Island y anoche se encontraba internado en el hospital Saint Vicent. El resto de los miembros de la tripulación fueron sometidos a pruebas de alcohol y drogas dentro de la investigación del suceso.

El servicio entre Manhattan y Staten Island -dos de los cinco barrios de Nueva York-, un recorrido de unos 25 minutos, es utilizado diariamente por unas 70.000 personas, según la compañía que se encarga de los cinco buques que hacen la travesía. Los pasajeros que lo usan -es un servicio gratuito- son tanto personas que viven en la isla, a unos 10 kilómetros al sur de Manhattan, y trabajan en Nueva York, como turistas que disfrutan de la perspectiva de los rascacielos y de la silueta de la Estatua de la Libertad. El barco que sufrió el accidente ayer, el Andrew J. Barberi, tiene una capacidad de carga máxima de 6.000 pasajeros y una eslora de casi 95 metros. Está en servicio desde hace 22 años.

* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 16 de octubre de 2003