Les escribo desde Sydney, donde vivo hace años. Afortunadamente, hay una cadena de TV donde se transmite el telediario todos los días por la mañana, pero desde que gobierna el excelso PP, he dejado de verlo porque no es que esté manipulado, es sencillamente un panfleto pepero; y conste que no me ciega la pasión, porque ya llevo tantos años fuera de mi país que, creo, veo los asuntos políticos con una cierta distancia.
Ahí no acaba todo, siempre me ha gustado escuchar la radio y desde hace unos meses ya puedo oír Radio Nacional por Internet. Pues resulta que me estoy encontrando con lo mismo, con el agravante de que aquí no se cortan ni un pelo, especialmente en algunos programas de Radio 1. Ahora que ha empezado la campaña a la Asamblea de Madrid, no vean cómo ponen a la oposición... En fin, estoy pasmada.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 20 de octubre de 2003