Los socialistas vascos van a mantener firmes al mismo tiempo su oposición frontal contra el plan soberanista del lehendakari, Juan José Ibarretxe, y el dique de contención contra las sucesivas intentonas de los populares para reeditar la entente apadrinada por el ex líder del PSE, Nicolás Redondo Terreros, y el presidente del PP vasco, Jaime Mayor Oreja, en las autonómicas de 2001.
Ayer fue el portavoz parlamentario de los socialistas vascos, Rodolfo Ares, el encargado de reiterar al nuevo líder del PP, Mariano Rajoy, que "se equivoca" al querer reeditar se propuesta de crear un frente contra Ibarretxe. Y le recordó que la búsqueda de una alternativa conjunta entre populares y socialistas al nacionalismo, "lejos de reforzar el constitucionalismo" y su pluralidad en Euskadi, alimenta una "estrategia de confrontación" con el PSE y evidencia que el PP sólo juega a "políticas partidarias, en vez de a la política con mayúsculas e inteligente para hacer frente al desafío más importante que tenemos".
Los socialistas son conscientes de que algunos de sus militantes, ediles y ex dirigentes apuestan firmemente por esa vía de colaboración -Redondo Terreros o las profesoras de la UPV Edurne Uriarte y Gotzone Mora-, pero no tienen intención de abrir expedientes contra un sector crítico que ha visto diluido el apoyo que tenía en el congreso de 2002. Ares recalcó que los militantes de su formación "saben cuál es el proyecto que han aprobado en sus congresos, un proyecto progresista y autonomista propio, y lo defenderán" y que quienes critican a la actual ejecutiva son "afiliados muy concretos".
De su ex secretario general, Ares dijo que será "él quien deba explicar por qué el ex máximo dirigente de un partido presenta la conferencia de un dirigente rival, algo inédito en política", en alusión a la charla de Mayor en el Siglo XXI.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 21 de octubre de 2003