El Gobierno catalán ya sabe cuánto dinero deberá invertir en la red que desplegará el nuevo operador público de telecomunicaciones que ha decidido crear a pocas semanas de las elecciones. Serán 60 millones de euros, y servirá para cubrir la construcción de los tramos de la red que queden al margen de la que se prevea en el diseño de redes viarias y ferroviarias de toda Cataluña. Así lo explicó ayer el secretario de Telecomunicaciones, Jordi Alvinyà, quien subrayó que el operador Cat-Telecom "no será un operador finalista" que vaya a "competir" con los operadores privados y quien aseguró estar estudiando acuerdos para aprovechar la red de empresas privadas como Abertis o Gas Natural (a éstas no les constaban ayer negociaciones).
Estas explicaciones aumentaron la "alarma" de Telefónica por "el espiral de mensajes incoherentes" de la Generalitat.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 30 de octubre de 2003