Más atención a las personas y al mantenimiento del espacio público. Son dos de las líneas maestras de los presupuestos de 2004, que ultima el Ayuntamiento de Barcelona. El debate sobre cuáles serán las cuentas municipales del año próximo se inició en la comisión de gobierno celebrada ayer. El capítulo de atención a las personas -en el que se encuadran todos los servicios sociales, cultura y educación- se llevará el 27% del presupuesto.
A falta de las cifras concretas del presupuesto, varias fuentes consultadas señalaron que en las cuentas de 2004, y también en los otros tres años del mandato, se dará prioridad a la atención a las personas. "Es una decisión política", precisaron fuentes cualificadas del consistorio. La "decisión política" está directamente relacionada con el resultado electoral y con el mayor peso de Esquerra Republicana e Iniciativa per Catalunya en el equipo de gobierno.
En el capítulo de atención a las personas se incluyen los servicios sociales, y entre éstos, dos de los que incrementarán notablemente su presupuesto serán el de atención domiciliaria y el programa de lucha contra la pobreza, según apuntaron fuentes conocedoras de la preparación de las cuentas municipales.
La segunda prioridad, con el 22% del gasto corriente del presupuesto, será el mantenimiento del espacio público y la limpieza -una de las quejas principales de los barceloneses -m que abarca desde el mobiliario urbano hasta espacios como las plazas y parques y jardines.
El tercer capítulo se destinará a la seguridad y el transporte, y a éste se le asignará el 16% del presupuesto. Por último, el cuarto epígrafe está destinado a urbanismo y promoción económica, con el 5,6%. El gasto corriente del Ayuntamiento para 2004 se cifra en 1,2 millones de euros.
"Los presupuestos se aprobarán en la comisión de Presidencia y Hacienda ya que, además, están ligados a la definición de prioridades", señaló el concejal de Presidencia, Ferran Mascarell. En la práctica supone que la aprobación de las cuentas tendrá lugar después de las elecciones autonómicas, con lo que la polémica que suscite -siempre asegurada- quedará fuera de la campaña. La comisión de gobierno dio el visto bueno al convenio firmado por el Ayuntamiento y la Generalitat para la construcción de la nueva Filmoteca de Cataluña y el Instituto Catalán de las Industrias Culturales junto a la Rambla del Raval. En concreto, en 4.000 metros cuadrados situados entre la plaza de Salvador Seguí y las calles de Espalter, Sant Pau y Sant Josep Oriol. El convenio estipula que el plazo máximo para la entrada en funcionamiento de la nueva filmoteca será de cuatro años.
También se aprobó un plan para la promoción del civismo con cuatro ejes: limpieza, ruido, espacios de convivencia y movilidad.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 6 de noviembre de 2003