Selecciona Edición
Selecciona Edición
Tamaño letra
Crítica:CRÍTICAS

Una mirada inocua

Nada sorprenderá más a quien haya retenido el nombre de Rose Troche como el de la autora de Go Fish!, filme militantemente lésbico (y considerablemente memo), que el verlo relacionado con esta película. Porque más allá de la pretensión de que a alguien que no estuviese estrictamente involucrado en lo que allí se contaba le interesara el asunto, no cabe duda que Go Fish! se planteaba como una provocación contra el cine al uso, hecho desde una periferia independiente y perfectamente asumida, mientras que aquí lo que hay es un producto claramente industrial, con un buen elenco de actores, un tema "fuerte", que no es otro que las pulsiones oscuras que subyacen detrás de la aparente "normalidad" de la vida cotidiana, en una película hecha, como tantas otras contemporáneas, a partir de una estructura coral, con personajes que se entrecruzan y un eje casual, un terrible accidente que, por decirlo de alguna forma, ordena todas las líneas del relato.

LA SEGURIDAD DE LOS OBJETOS

Dirección: Rose Troche. Intérpretes: Glenn Close, Dermot Mulroney, Opatricia Clarkson, Mary Kay Place. Género: drama, EE UU, 2001. Duración: 121 minutos.

No queda, no obstante, nada de la capacidad de revulsión que Troche mostraba en su película anterior. Aquí, su mirada resulta virtualmente plana, brilla por su ausencia su capacidad para acercarse a sus criaturas (meramente para acercarse: ni para quererlas, ni para despreciarlas; pero sí para mostrar en ellas algún resquicio de humanidad, alguna comprensión para su formidable angustia, que no es otra la pulsión que subyace en todas), de forma que la película adquiere, a medida que va desarrollándose ante los ojos de su espectador, la pesada rigidez de lo monótono, la inanidad de lo inocuo, la plúmbea falta de gracia de lo prescindible.

* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 7 de noviembre de 2003