El presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, afirmó ayer en Reus que la presencia de ICV-EUiA en el Gobierno de la Generalitat frenaría el desarrollo industrial, agrícola y el turismo en Cataluña. Pujol comentó uno a uno el papel en el debate del viernes de los cinco contendientes en las elecciones del próximo 16 de noviembre y atacó directamente la posibilidad de pacto tripartito entre el PSC, ICV y ERC: "Si llegaran a tener poder en un Gobierno tripartito", afirmó en referencia concreta a ICV, "se pararía todo: no sé cuántos túneles, no sé cuántas líneas eléctricas y no sé cuántos regadíos".
A juicio de Pujol, si fuera por Joan Saura, el candidato ecosocialista, "no se habría podido realizar el regadío de La Figuera" -población que visitó en la mañana de ayer-, obra que puso como ejemplo de la política de reequilibrio territorial de los Gobiernos que él ha presidido. Salou, la población turística que visitó a mediodía, "tampoco existiría según el programa de ICV", insistió. Ni siquiera la petroquímica de Tarragona, "que tendrá los inconvenientes que quieran, pero que se encuentra al inicio de un gran progreso económico y todavía lo está".
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* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 9 de noviembre de 2003