La producción azucarera de esta campaña se elevará a unas 900.000 toneladas, según las previsiones manejadas por la industria una vez terminada la molturación en las provincias del sur y apenas iniciada la recolección en las provincias del centro y del norte. España tiene una cuota esta campaña de 991.000 toneladas, lo que supondrá eliminar parte de los excedentes reportados la campaña pasada y que ascendían a 192.000 toneladas.
Este recorte en la cosecha se ha debido tanto a los efectos negativos de la ola de calor, especialmente en los secanos, como por una reducción de las superficies de cultivo ante la situación excedentaria y los bajos precios percibidos para esa remolacha en los años precedentes. Parte de esas superficies se han destinado al maíz.
En las provincias del sur, la campaña de verano ha sido muy floja en volumen y en rendimientos con una producción de sólo 2.022.000 toneladas de remolacha y 267.000 toneladas de azúcar. En la zona centro, la producción esperada es sólo de unas 400.000 toneladas de remolacha y 60.000 toneladas de azúcar. A estas cifras se suman unas 5.000 toneladas de azúcar de caña.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 17 de noviembre de 2003