Clément Grévin lleva tres años estudiando Inglés, Alemán y Español aplicados a la Gestión Empresarial, la Economía y el Derecho en la Universidad francesa de Metz. A principios de septiembre llegó a la Universidad de Jaén (UJA) con una beca Erasmus y se llevó "una grata sorpresa".
Pregunta. ¿Por qué se decantó por la UJA?
Respuesta. Sinceramente, la primera vez que escuché hablar de Jaén, no sabía localizarlo en el mapa, pero era el único lugar con el que mi universidad había firmado un convenio de colaboración de un año y no de seis meses, como ocurría con los otros destinos.
P. ¿Qué diferencias encuentra entre la UJA y su universidad?
R. En términos generales, el sistema universitario francés es muy similar al español en las formas de impartir las clases y en el número de alumnos. Pero lo que más me ha llamado la atención es el campus de la UJA, donde se encuentran reunidas todas las facultades, y además, está todo muy limpio.
P. ¿Las principales dificultades con las que se ha encontrado?
R. Sobre todo, cuadrar mi horario porque la carrera que estudio en Francia no se encuentra reconocida como tal en la UJA y tengo que asistir a clases de diferentes licenciaturas como Turismo, Filología Inglesa o Derecho. Además, está todo el papeleo que tengo que realizar para conseguir que me convaliden las asignaturas de este curso en mi universidad francesa.
P. ¿Merece la pena?
R. Sí, por supuesto. Esta experiencia no sólo me sirve desde el punto de vista académico, sino como vivencia personal. Ayuda a abrir la mente y a ver el mundo de forma diferente.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 18 de noviembre de 2003