Manuel Azaña nació en Alcalá de Henares el 10 de enero de 1880. Quedó huérfano de madre a los nueve años, y su padre, hombre acomodado y alcalde de talante liberal, murió meses más tarde, no sin antes escandalizar a todos sus familiares al casarse in artículo mortis con una sirvienta. Azaña siguió sus estudios de bachillerato en el colegio de los agustinos de El Escorial. Rememora aquellos días en El jardín de los frailes, novela publicada en 1927.
Estudiante de talento, obtiene la licenciatura de Derecho en la Universidad de Zaragoza en 1898 y se doctora dos años más tarde. Con 30 años entra por oposición en el Cuerpo de Registros y poco después obtiene una beca de la Junta de Ampliación de Estudios que le permite marcharse a París en 1911.
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Al regresar a España, Azaña se afilió al Partido Reformista de Melquiades Álvarez. Tras el golpe de Estado de Miguel Primo de Rivera, abandonó el partido, al que acusó de tibieza frente al dictador, y fundó Acción Republicana. Junto a Cipriano Rivas Cherif, creó la revista La Pluma, en la que escribió ensayos y artículos que luego fueron recopilados en el libro Plumas y palabras. En 1926 obtuvo el Premio Nacional de Literatura por su obra Vida de don Juan Valera. En 1929 se casó con Lolita, hermana pequeña de Rivas Cherif y 20 años menor que él. En 1930 es elegido presidente del Ateneo de Madrid y, convertido en referente obligado del republicanismo liberal, participa en el pacto de San Sebastián que llevó al hundimiento de la monarquía.
Líder político
Azaña es nombrado ministro de la Guerra al proclamarse la II República en abril de 1931. Tras las elecciones de octubre de ese año, pasó a presidir un Gobierno en colaboración con los socialistas. En septiembre de 1933 presentó su dimisión y, después de la victoria electoral de los partidos de centro-derecha, pasó a la oposición. Aparecieron entonces sus obras La invención del Quijote y otros ensayos, Grandezas y miserias de la política y En el poder y en la oposición (1932-1934).
Encarcelado durante la Revolución de Octubre del 34, al salir de prisión impulsó el Frente Popular, que ganó las elecciones de febrero de 1936. Azaña se convirtió entonces en presidente de la República. Tras el levantamiento militar que llevó a la Guerra Civil, se mantuvo como jefe del Estado. En 1937 publicó La velada de Benicarló y dos años después se exilió en Francia. Murió el 4 de noviembre de 1940 en Montauban. Sus Memorias aparecieron póstumamente, en 1978. /
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 22 de noviembre de 2003