Horas antes de la inauguración oficial ya podía hablarse de éxito. Por la calidad media de las obras presentadas, por la buena acogida que ha tenido entre los profesionales del sector y por la originalidad de la propuesta. La primera edición de la feria de videoarte Loop, que organiza la asociación de galerías Art Barcelona (www.artbarcelona.es), abrió ayer con una nutrida asistencia de públio sus puertas en el hotel Barceló Sants con el objetivo de situarse en la vanguardia del mercado internacional del videoarte.
Loop'00, que sustituye a la feria New Art, reúne hasta el próximo día 30 (entrada, 10 euros) a un conjunto de 43 galerías -17 de las cuales son extranjeras- y 5 centros educativos o de producción con el denominador común de que sólo presentan vídeo. La mayoría opta por la proyección sobre pantalla, pero también hay monitores de televisión, videoesculturas, intalaciones, pantallas de plasma, proyecciones sobre la cama de la habitación e, incluso, sobre una frágil hoja de papel. Las obras presentadas tienen una duración que oscila entre 30 segundos y una hora, aunque la mayor parte no supera los 15 minutos, y los precios se sitúan en un arco entre 1.000 y 15.000 euros.
La variedad de soportes y precios corre pareja con la de propuestas estéticas. Pueden verse desde piezas de alto contenido poético, como Terminal III, de Tim White (galería Pilar Parra), hasta obras totalmente documentales, como El Zapillo. Almería, de Marisa González (galería Vanguardia), pasando por obras de crítica social, como The Iberoamerican legend, de Martin Sastre (galería Llucià Homs), o por piezas de imagen virtual, como 89 seconds at Alcazar, de Eve Sussman (galería Roebling Hall). En Loop también se presentan los últimos trabajos de los artistas Juliao Sarmento, Chema Alvargonzález, Jordi Colomer, Joan Morey, Juan Pueyo, Eva Teppe, Ricardo Iglesias y Mathilde Rosier, entre otros.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 28 de noviembre de 2003