El presidente de Castilla-La Mancha, José Bono, es partidario, a título personal, de una reforma de la Constitución, limitada al Senado y a garantizar la igualdad de la mujer en la sucesión a la Corona, siempre que se alcance el mismo grado de consenso que las fuerzas políticas lograron en 1978 para aprobar el texto constitucional.
Bono hizo estas manifestaciones en el pleno de las Cortes regionales durante un acto de homenaje a la Constitución en su vigésimoquinto aniversario. El presidente castellano-manchego advirtió de que actuarían "contra legem" (contra la ley) quienes pretendieran modificar la Constitución al margen del procedimiento que el propio texto establece.
En su discurso señaló que la Constitución es fruto "de un espíritu y una manera de actuar" que se basan en el diálogo, la tolerancia y la lealtad. Por eso, "nos duele que algunos que no comprenden ese espíritu la utilicen para tirarla a la cabeza del que se cruza por su camino", añadió. También destacó Bono que no se trata de un texto "inmutable, ni escrito en ningunas tablas de la ley, al que hayan de someterse las generaciones". No es un texto "inalterable", pero es necesario "cumplirlo y hacerlo cumplir".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 28 de noviembre de 2003