José María Aznar se declaró ayer "razonablemente satisfecho" con la decisión de la UE de que Francia sea la única candidata europea a la sede del ITER, el reactor experimental de fusión que España esperaba ver instalado en Vandellós. El presidente del Gobierno, que no exhibió agresividad hacia el vencedor del concurso y sí culpó indirectamente del resultado a la moratoria nuclear vigente en España, apoyó su satisfacción en el hecho de que la agencia gestora de la participación europea en el proyecto sí estará en suelo español, preferentemente, dijo, en Tarragona.
"La UE ha elegido la sede francesa, pero ha dicho que la agencia europea encargada del proyecto estará en España y que uno de sus dos directores europeos será español. En definitiva, las cosas son para estar razonablemente satisfechos. Es la primera vez que podíamos competir en un proyecto de esta importancia y nadie puede poner un pero al proyecto de España", dijo Aznar, al ser preguntado al término de la primera cumbre hispano-argelina."Francia ha defendido sus intereses y tenía a su favor un factor que no es despreciable: su experiencia nuclear y, además, la ausencia de moratoria, a diferencia de España", añadió.En Barcelona, el consejero en funciones de Trabajo e Industria de la Generalitat de Cataluña, Antoni Fernández Teixidó, criticó ayer la "satisfacción" con la que el ministro de Ciencia y Tecnología, Juan Costa, recibió la elección de Francia para optar al ITER, informa Serafí del Arco. "No compartimos el entusiasmo de Costa para presentar el acuerdo como fantástico y excepcional", aseguró.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 28 de noviembre de 2003