He leído con atención la noticia aparecida en EL PAÍS Andalucía con el titular "EL Consejo de la Federación Regional de Transporte de CC OO pide la dimisión de su secretario general". Con el único ánimo de mantener informados a los lectores con datos precisos y lo más alejado de las polémicas previas al congreso de CC OO, deseo precisar los siguientes extremos.
1. Se refiere EL PAÍS a una reunión de una parte del Consejo de mi organización (la formada por los seguidores de Fidalgo), que ha sido impugnada a las Comisiones de Garantías de mi federación estatal y de las CC OO de Andalucía, entre otras cosas porque ni yo estaba en esa reunión (que era el convocante), ni los componentes de la Mesa que según su reglamento debían presidirla.
2. En ninguna organización de las Comisiones Obreras, el Consejo tiene entre sus competencias la de elegir o revocar a su secretario general, que solamente lo elige el Congreso, ante el que tiene que dar cuentas.
3. No existe apartado alguno en nuestros estatutos que me impida participar en el consejo de administración de una empresa pública.
4. La posición de la Sección Sindical de CC OO de Tussam la fija su ejecutiva, cuya opinión ha sido tergiversada por quien organizó la citada reunión en Córdoba, debido a que se alinea con la actual oposición al gobierno de progreso del Ayuntamiento de Sevilla.
No oculto que en pleno debate congresual, con el sindicato dividido en tres posiciones, es posible que intenten intoxicar a los medios con más "exclusivas".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 8 de diciembre de 2003